MEMORANDUM
Sobre
instalación de planta de incineración de residuos
hospitalarios en "parada Gómez"- Estación
Pedrera, Departamento de Canelones
Mayo
24 de 2000.
1)
Sobre las plantas de incineración de residuos
hospitalarios en general.
Las
incineración es uno de los métodos de disposición de
los residuos hospitalarios. Existen otros, como la
esterilización mediante vapor a alta temperatura (autoclaving),
el tratamiento mediante Arco de Plasma, sigla en inglés
PAR, el tratamiento mediante microondas y otros.
Los
residuos hospitalarios contienen una multiplicidad de
productos, papel, cartón, plástico, goma, restos de
comida, latas, botellas, esqueletos de animales, artículos
con filo (agujas, bisturíes ), restos de quimioterapia,
vendajes, solventes, y residuos patológicos (partes de
cuerpo humano, excretas, etc.) .
Los
residuos médicos también contienen metales como plomo,
cadmio, mercurio, y zinc. También pueden contener
radioactividad de bajo nivel.
La
composición de los residuos hospitalarios es en suma
similar a la de la basura domiciliaria, salvo que aquellos
contienen un 15% de lo que se denomina "basura
infectada" constituida por materiales contaminados
por patógenos. También cabe destacar que la basura
hospitalaria tiende a tener un contenido mayor de plásticos
que la domiciliaria.
Se
ha demostrado (1) que la incineración de basura
hospitalaria da lugar a la producción de varias
sustancias altamente tóxicas, para abreviar haremos
hincapié en
dos grupos de ellas:
A)
Dioxinas y furanos
B)
Metales pesados.
La
dioxinas son un grupo de sustancias altamente tóxicas,
producidas como subproducto en una serie de procesos químicos.
Contaminan algunos herbicidas (fenoxi herbicidas como
2,4-D , silvex), y clorofenoles. Los casos más famosos de
intoxicación masiva fueron la fuga de gas en una planta
de fabricación de herbicidas en Seveso, Italia en 1976
con miles de personas gravemente afectadas
y la intoxicación por el "agente
naranja", un herbicida usado en forma masiva por los
EEUU en la guerra de Vietnam, que estaba contaminado con
dioxinas. Su uso produjo miles de muertos entre los
vietnamitas y miles de intoxicados entre las tropas
norteamericanas.
Las
dioxinas son tan tóxicas que unos pocos microgramos matan
cerdos de guinea, o sea, un gramo podría matar cientos de
miles de personas. La intoxicación crónica por
cantidades menores
durante mucho tiempo produce cáncer y aumenta
sensiblemente el riesgo de enfermedades cardiovasculares .
Produce asimismo daño hepático, induce malformaciones
congénitas en el feto y causa daño al sistema
reproductor. En suma, se trata de uno de los venenos más
poderosos conocidos
Los
metales pesados incluyen, entre otros el cadmio, el plomo,
el mercurio, etc.
A
modo de ejemplo, la exposición prolongada al cadmio
produce un amplio abanico de efectos nocivos:
cardiovasculares (arterias corazón), endocrinos
(hormonas), hepáticos, en los huesos, la sangre, el
sistema inmunológico, el aparato respiratorio, los riñones
y el aparato reproductor.
Hay
una fuerte evidencia sobre un vínculo entre la exposición
al cadmio y el cáncer de pulmón.
En
la basura hospitalaria hay numerosos plásticos en cuya
constitución, ya sea para endurecerlos,
ya sea para colorearlos incluye metales pesados
altamente tóxicos, como plomo y/o cadmio.
2)
¿Hasta donde es posible eliminar estos productos de los
residuos de la incineración?
Hasta
donde sabemos, por la literatura internacional consultada
no es posible eliminar totalmente las emisiones de
dioxinas a la atmósfera en los incineradores de desechos peligrosos,
(incluyendo la basura hospitalaria).
3)
Se entiende que la depuración para eliminar parcialmente
los tóxicos producidos durante combustión de basuras
hospitalarias requiere una tecnología cara y sofisticada.
Esta tecnología debe ser mantenida, usando los insumos
adecuados en la cantidad correcta.
Para ello es imprescindible un sistema de control
independiente de la empresa propietaria de la planta.
Es
interesante hacer notar que con motivo de la situación
creada por la aparición de comida proveniente de Bélgica
presuntamente contaminada con dioxinas salió a luz el
hecho de que no existe en el país la tecnología para
determinar la concentración de éstas en los alimentos.
¿cuáles son entonces la posibilidades reales de control
sobre ésta planta?
Es
más, como es de público conocimiento el
Ministerio de Salud Pública y el sistema mutual mantienen
un gran atraso en los pagos, de decenas de millones de dólares
con sus proveedores, que según lo conocido hasta ahora a
través de la prensa el Gobierno central se niega a
financiar ; ¿Qué sucederá cuando los propietarios de
esta planta se vean obligados a financiar de su propio
bolsillo durante meses o años el elevado costo que
implica hacer funcionar la planta con el conjunto de
medidas de seguridad necesarias?
No
nos parece lógico pensar que se van a mantener los estándares
de seguridad en esas condiciones.
Es
también motivo de honda preocupación el hecho de que la
planta quedaría habilitada para destruir medicamentos
vencidos. Sería utilizada para destruir medicamentos
vencidos procedentes de las zonas francas, los cuales
pueden a su vez ser el producto natural de un comercio
genuino, con sus alternativas o el resultado de la decisión
de los países centrales de quitarse de encima el espinoso
problema de disponer de los mismos mediante su envío a países
como el nuestro. La afirmación de los responsables de
DINAMA de que todos los lotes de medicamentos a ser
destruidos deberán constar con una autorización especial
no nos tranquiliza, demasiado sabemos cuántas veces esos
controles has sido ineficaces para impedir un uso abusivo.
4)
Características de la zona
Se
trata de una zona rural, con una densidad de población no
inferior a 50 habitantes por kilómetro cuadrado. En un
radio de 1300 metros de la misma existen dos escuelas
primarias, un tambo que produce 3000 litros diarios de
leche, una panadería industrial, un granja de frutales
con unas 70 hectáreas de plantación, que destina parte
de su producción a países de la Comunidad Europea, por
lo menos dos granjas que crían pollos a facon, y
numerosos establecimientos ganaderos y de producción de
hortalizas.
Hay
también a menos de 500 metros numerosas colmenas para la
producción de miel y sus derivados.
A
dos mil metros
se encuentra el pueblo de Estación Pedrera, con unos
doscientos habitantes, y a mil quinientos metros un
productor de la zona se encuentra iniciando un proyecto de
producción de hortalizas en forma ecológica.
A
unos 7 km. De la planta proyectada (y en la dirección de
los vientos predominantes) se encuentra San Jacinto, con más
de 7 mil habitantes.
Por
último, los cambios en la propiedad de la tierra
inducidos por la situación del sector agropecuario están
transformando la zona paulatinamente en lugar de vivienda
de personas que huyen del ruido, la contaminación y el
ritmo de vida de la ciudad para buscar un ambiente de paz
sin contaminación.
En
función de lo anterior la zona está destinada a
transformarse en un plazo no demasiado largo en un lugar
de asentamiento de establecimientos de tipo turístico,
precisamente basándose en la cercanía de la costa por un
lado (el balneario de Atlántida a 18km.), de la
ciudad-capital por otro y de su ausencia de contaminación
ambiental y ruido ¿qué sentido tiene instalar una
industria de estas características, que además dará
ocupación a muy pocas personas de la zona en ella?
5)
No se hizo un
estudio, ya que se trataba de instalar esta planta en el
Departamento, de cuál es la zona del mismo más apta para
ello, si es que hay alguna. Varios de los vecinos que
concurrieron a la reunión citada por la DINAMA
(Ministerio de Vivienda Ordenamiento Territorial y Medio
Ambiente) lo preguntaron insistentemente, no obteniendo
respuesta.
Tampoco
sabemos (y tenemos derecho a suponer que
no ha sido así) si se ha hecho un estudio profundo
de cual es la forma más inocua de disponer residuos
hospitalarios con un costo aceptable. Existen hoy varias
alternativas a la incineración, que hasta donde sabemos
es un método que tiende a abandonarse a nivel mundial
6)
Por todo lo antedicho se ha creado un amplio movimiento en
la zona que se ha organizado en
torno a una comisión "Por un Canelones
Limpio", que está coordinando los esfuerzos para, en
una primera instancia,
suspender la autorización por parte de las
autoridades para la instalación de ésta planta. En dicho
movimiento participan personas de distinta extracción
social, productores, chicos y medianos, asalariados
rurales, profesionales, gente de todas las afiliaciones
políticas que buscamos mantener la zona como un lugar de
producción agropecuaria esencialmente limpia, más bien
tendiente a descontaminar y promover el desarrollo turístico
y agropecuario de la misma.
No
entendemos porqué se destina un lugar estrictamente rural
del Departamento para instalar una planta incineradora de
residuos hospitalarios peligrosos. |